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Arquitectos: Carter Williamson Architects
- Área: 160 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Katherine Lu
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Proveedores: Bowral / Brickworks
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Concrete Blonde es una caja de joyas arquitectónica. Se trata de una casa de campo renovada en Annandale que se despliega desde una modesta fachada patrimonial hasta una vivienda de amplios espacios. La calidez se expresa a través de los tonos tierra y los materiales naturales, capturando la luz a través de sus tragaluces y el patio interior.
Nuestros clientes querían crear un lugar de reunión para la familia y los amigos, pero también un santuario de paz para cuando estuvieran solos. Su casa necesitaba bloquear el ruido de las carreteras cercanas y de los aviones, para crear un espacio tranquilo al que pudieran volver después de un día ajetreado. Creen firmemente que la cocina es el corazón de la casa, un lugar para mantener conversaciones profundas y establecer conexiones. Pero para contrarrestar esto, también destacaron la necesidad de espacios privados que se adapten a cada persona. Dado que el proyecto se encuentra en un terreno de 5 metros de ancho, era necesario que la secuencia y la circulación por la casa fueran prácticas.
La sala de estar fluye hacia la cocina y el comedor de la casa, las puertas correderas de cristal negro se disuelven para conectar la cocina con el patio trasero. Estos cuatro espacios, el exterior, la cocina, el salón y el comedor, se unen para crear un centro común. Un patio de azulejos y plantas alberga un pozo de luz que llega a todos los niveles de la casa, sobre todo a los espacios habitables de abajo. El patio separa las zonas comunes y las privadas, responde al cambio de nivel y a la necesidad de luz natural en este bloque tan estrecho.
También permitimos que la luz inundara la casa esculpiendo un vacío curvo situado sobre el salón, lo que permite que la luz natural atraviese el espacio compartido de la sala de estar y el comedor, creando un entorno tranquilo y contemplativo.
Se utilizó una paleta de hormigón y ladrillo claro junto con muebles de madera a medida. El banco de la cocina hace una transición perfecta hacia los asientos y el comedor, los armarios de roble de Tasmania y la carpintería acabada en blanco complementan los asientos del banco tapizados en cuero de color verde oscuro. La mesa es una colaboración entre Carter Williamson y Will Brennan, un diseñador de muebles de Orange. Los verdes de Concrete Blonde son un guiño a los árboles autóctonos que se mecen en el patio trasero, al color de la antigua cocina de la casa y a los recuerdos de las casas de la familia de nuestros clientes en Grecia.
Hay muchos aspectos únicos en este proyecto, como el vacío lineal curvado que se encuentra sobre el espacio de la sala de estar, y que sirve de puente para la luz del norte procedente de una alta ventana. A menudo recibimos fotos de Irene mientras trabaja desde casa y observa cómo se mueven los juegos de luces y sombras a lo largo del día.
Este proyecto es especial por los diversos momentos e historias que nuestro cliente aportó a la vivienda. Por ejemplo, una bolsa de bolitas de vidrio suministrada por el cliente se colocó en el suelo de hormigón durante la construcción y posteriormente se pulió para revelar sus colores junto al agregado de pequeñas piedras de río. Este es un ejemplo de cómo la buena arquitectura surge de la colaboración entre el arquitecto, el constructor y el cliente, respetando las ideas de todos.
